Isle of Man

Isle of Man es una fragancia decididamente masculina, una celebración de la valentía y la intrepidez para aquellos que se ríen ante las adversidades que desafían a la muerte. Rinde homenaje a los espíritus libres y a los adictos a la adrenalina que saben que vivir de verdad significa superar los límites. Nunca se está más vivo que cuando la vida está en juego

La anterior creación de Frapin, El hombre orquídea, era una oda no sólo al boxeo, sino a la mentalidad del contendiente. Del mismo modo, Isla de Man no es sólo un perfume inspirado en el automovilismo. Representa toda una filosofía: vivir intensamente, cada segundo como si fuera el último, aunque eso signifique acercarse peligrosamente al límite. La vida debería ser cualquier cosa menos aburrida

David Frossard, aficionado a las motos y a los deportes extremos, confió esta interpretación a la perfumista Aliénor Massenet. Su creación posee una auténtica firma olfativa. El ataque cítrico seguido de acordes florales salados evoca la embriagadora descarga de adrenalina que supone descender por una costa bañada por el océano